¡Hola de nuevo! Hoy nos queremos centrar en un tema que te puede resultar muy interesante si estás pensando en emprender e incluso si lo que buscas es optimizar los recursos de tu negocio.
Tal y como vimos hace tiempo, la transformación digital es un paso obligatorio para todo negocio. ¿Y por qué decimos que es obligatorio? Por la sencilla razón de que el mundo hace uso de las nuevas tecnologías. ¿Vamos a estar fuera de un mundo que nos va a incluir, queramos o no? ¡No tiene sentido!
Puede que, al principio, este laborioso proceso dé un poco de vértigo, pero la realidad es que es imprescindible para el progreso de nuestro negocio. La flexibilidad de los horarios, la comodidad de trabajar dónde y cuándo se quiera son algunos de los aspectos que hacen de la transformación digital sus puntos fuertes.
Si a todo ello le unimos que Internet es el mejor escaparate que todo negocio puede tener, vemos que nos puede ser de gran utilidad si queremos emprender, sin tener que realizar una gran inversión, algo que no tienen todos los emprendedores en sus inicios.
Tener una buena presencia en Internet, si se hacen bien las cosas, no debería de suponer un coste excesivo y es un canal donde poder captar potenciales clientes, ya sea a través de una página web o de las redes sociales.
Ahora bien, quedan otras cuestiones que quedan por resolver. Por ejemplo, uno de los gastos más importantes que tiene que hacer un emprendedor cuando empieza su negocio y no cuenta apenas con ingresos tiene que ver con su oficina. Tener una sede física puede costar mucho para nuestro nivel de ingresos. Entonces, ¿qué hacemos?
Oficina Virtual, la solución para empezar un negocio en la era digital
Precisamente, la flexibilidad y las nuevas tecnologías pueden hacer que trabajemos en cualquier sitio, ¡hasta en nuestra propia casa! Si tu negocio es digital, necesitas poco más que un ordenador, una buena conexión a Internet y un buen espacio de trabajo.
Eso sí, siempre quedan algunos flecos para progresar en nuestro negocio. Por ejemplo, un espacio para poder reunirnos con un posible cliente. A no ser que tengas mucha confianza, quedar con él en tu casa o en un bar no tiene mucho sentido, ¿verdad? Necesitas de un espacio donde dar una imagen formal y seria.
De igual manera, que tu negocio tenga una dirección social, fiscal y comercial, así como de un personal que atienda la recepción de correo, puede serte de gran utilidad, aunque no sea tu lugar de trabajo del día a día.
Para este tipo de situaciones, la mejor solución es tener una oficina virtual, ¡consulta aquí todas sus ventajas! Por un módico precio, puedes tener no solo lo que hemos mencionado,, también la atención de visitas o el uso de reuniones puntuales que necesites.